domingo, 23 de octubre de 2011

SONIA




Tu nombre en el encabezamiento de unos versos que fluyen hacia ti, amor, tu nombre palpable que beso y adoro en la soledad que me destruye... Lo grabo, grabo tu nombre en la dorada arena y lo borran las olas con su lengua de infinita espuma, y torno a grabarlo en el milenario cuarzo hasta que la noche me vence y me quedo dormido bajo el fuego destellante de las estrellas, al pie de una mandrágora que agita sus brazos, frente al horizonte que me llama y no hallo camino... Mi verso es tu nombre, Sonia, sonoro verso de caracola susurrando a mi oído las distancias y los besos, Sonia imposible, mi diosa y mi reina hasta el fin de los días, ámame, ven, deja que mis manos te acaricien, deja sólo un momento que pueda besarte, y tiéndete en esa orilla tuya en que una ola de fuego te alcanza mi deseo...


No hay comentarios:

Publicar un comentario